QUITO – El vicepresidente de Ecuador, Jorge Glas, sospechoso de corrupción por el caso Odebrecht, se entregó a las autoridades luego que un juez dictara prisión preventiva en su contra. Glas ingresó en una prisión al norte de la capital ecuatoriana, a la que fue trasladado por la Policía tras su arresto en la ciudad de Guayaquil, acompañado de su tío Ricardo Rivera, también sospechoso del mismo delito de asociación ilícita.