Bueno, queridos amigos, la noticia buena del momento es que intervino la policía e impidió que unos indígenas que llegaron a Bogotá a ser parte fundamental de este paro idiota que tenemos en el día de hoy; impidió, digo la policía, que tumbaran los monumentos levantados en homenaje a los Reyes Católicos sobre la Calle 26, por lo menos eso se logró. Porque entre las idioteces que se están cometiendo una de ellas es olvidar los orígenes de nuestra cultura, lo que somos, lo que hemos sido y lo que hemos sido tiene como resultado lo que somos, un país mestizo con una enorme influencia hispánica que nos debía honrar y que nos debía estimular y que debíamos comprender. Pero parece que nada de eso tuviera influencia con estos infames. Un gran científico colombiano, uno de los más grandes médicos de este país, los llamó así: “infames”, de qué otra manera se puede llamar a los que están promoviendo estos acontecimientos, supuestamente multitudinarios que conducen directamente a una cama UCI a una crisis hospitalaria que desborda toda la capacidad que el estado tenga para atender enfermos. Por todas partes vienen noticias catastróficas sobre lo que está pasando con los enfermos en Colombia…
