Uno se pregunta si hubiera sido posible manejar de peor manera la crisis que desató la revelación de que se había ocultado durante un tiempo, que no sabemos exactamente cuánto sería la noticia, de que en el bombardeo contra “El Cucho”, un temible y detestable agente de las FARC dedicado al narcotráfico, había muerto también menores de edad, menores de edad que desde luego se llaman niños para producir un impacto mayor en la conciencia de la gente; pues no, no hubiera sido posible manejar de peor manera el asunto. Este es el momento en que el presidente Iván Duque, por cuyo gobierno y por él mismo tenemos grandes simpatía y eso lo repetimos una y otra vez, pero a los amigos hay que decirles la verdad, y la verdad por dolorosa que sea hay que decirla, y hay que decirle en este momento que su situación es crítica, crítica…
