EL CAIRO – El presidente egipcio, Abdel Fatah al – Sisi, prometió una severa retaliación en contra de la organización extremista que protagonizó el ataque el viernes pasado contra la mezquita de Al-Rawdah en la Península del Sinaí, en el que 305 personas fueron asesinadas y 128 más resultaron heridas. El fiscal del caso reportó ayer que los atacantes portaban una bandera del grupo extremista del Estado Islámico ISIS.