WASHINGTON – En medio de fuertes críticas por no haber atendido antes la situación, el presidente estadounidense Barack Obama visitó ayer el estado de Louisiana, prometiendo $127 millones de dólares adicionales en fondos federales para aliviar los daños dejados por las históricas inundaciones en la región, que hasta el momento le han causado la muerte a 13 personas y han dejado a cientos de damnificados.