WASHINGTON – Un poderoso sistema climático se mueve por el nordeste y centro de los Estados Unidos, generando potentes vientos denominados como un “ciclón bomba” que generó estragos en más de 14 estados y afectó a 80 millones de personas, incluyendo más de 1.200 vuelos cancelados, árboles caídos, viviendas afectadas, y dejando a 650 mil personas sin fluido eléctrico, todo mientras que una poderosa tormenta invernal golpea el centro del país, y otro sistema desató un tornado que destruyó viviendas y dejó a por lo menos una persona muerta en el estado de Mississippi.