Durante su visita a Cartagena, el papa Francisco visitó el barrio San Francisco, uno de los más humildes de esa ciudad, y bendijo las piedras dónde se iniciarán obras para construir viviendas para niñas y adolescentes en riesgo, así como habitantes de la calle.
Justo en su recorrido por esta zona de Cartagena, el Santo Padre sufrió un percance cuando el papamóvil tuvo que frenar de manera inesperada propinándole un golpe en la ceja y pómulo izquierdo; sin embargo, esto no lo detuvo para continuar su agenda del día.
Después rezó el Ángelus en la Iglesia San Pedro Claver, donde también se pronunció sobre la situación de Venezuela esperando que se encuentre una solución a la crisis que se vive en el país vecino.