La idea y la práctica de distraer al pueblo, en momentos en que hay graves dificultades, en momentos de muy serios y graves reveses para el gobierno de turno, a través de pan y circo, es tan vieja como la humanidad lo puede recordar. En Roma, cuando las cosas marchaban con dificultades se hacían grandes desfiles, había unos emperadores payasos que organizaban triunfos que era la más grande manifestación, conmovida de agradecimiento que se rendía a un grande héroe…