Hace noticia en La Hora de la Verdad Nohora Tovar Rey, senadora por el Centro Democrático, quien habló sobre la situación en el departamento del Meta, pues continúan las extorsiones y los actos criminales en contra de la población. 

La senadora Tovar expresó que el Meta, Guaviare y en toda la región de la Orinoquia “Nos levantamos como el ave fénix de las cenizas con las seguridad democrática del Centro Democrático”, pero ahora se ve cómo esta región se ha convertido en una puerta a la criminalidad, además el Gobierno hace de todo para cumplirle a las FARC lo acordado. 

Recalcó que los grupos disidentes de las FARC han incrementado su presencia en los departamentos del Guaviare, Guainía, Vichada y el sur del Meta. Están incinerando vehículos de transporte público, camiones de leche, afectando a la gente de bien, además recordó que sigue secuestrado el funcionario de la ONU y el Gobierno no lo vuelto a mencionar. 

Aseveró que es demasiada coincidencia que los frentes guerrilleros que cuidan los cultivos ilícitos son los que hayan desertado. El Gobierno dice que son unos 200 narco guerrilleros disidentes, pero la comunidad del Guaviare y demás municipios de la zona, asegura que son por lo menos 500. 

La senadora Tovar también denunció que las zonas de concentración se han convertido en puntos calientes para el orden público, como la de Mesetas en el departamento del Meta, así lo denuncian los comerciantes de la zona que siguen siendo extorsionados. Les cobran 200.000 pesos por lancha, 50.000 pesos por galón de gasolina, 10.000 pesos por cabeza de ganado, entonces ellos tiene que pagar porque los amenazan, “O pagan o se van”. 

Agregó que no nos sorprenda que pronto estas zonas se conviertan en municipios, pues ya les cambiaron el nombre para mantenerlas. Afirmó que no se sabe cuál es el papel de la ONU porque aún no han  informado cuántos son los guerrilleros que han desertado ni cuántos menores hay en las zonas veredales, además no es posible que la UNICEF no exija la salida de estos niños. 

También denunció que entre los municipios de Miraflores y Calamar se encuentra  el principal centro de operaciones del Frente Primero de las FARC, y Villavicencio está infectada de microtráfico, los menores están siendo usados para cometer delitos y las bandas criminales distribuyen unas 200.000 dosis de bazuco en colegios y polideportivos. 

La senadora Nohora Tovar Rey pide al Gobierno que tenga contacto con la población de esa zona, pues la situación que se vive es muy delicada.