La diócesis católica de Istmina y Tadó en el departamento del Chocó informó sobre un nuevo desplazamiento masivo y estimó que cerca 1.200 personas que se encontraban en la zona de Medio San Juan y Bajo Baudó tuvieron que desplazarse al corregimiento de Puerto Olave.
Monseñor Fabio Álvarez, obispo de la diócesis de Istmina – Tadó, indicó que estas personas atraviesan por una grave crisis humanitaria y requieren atención inmediata. El sacerdote hizo un llamado a que les sean restablecidos sus derechos humanos.
La mayor cantidad de desplazados pertenecer a la comunidad indígena Wounaán, quienes se encuentran asentados en un territorio disputado entre las Autodefensas Gaitanistas de Colombia y la guerrilla del ELN.