Queridos amigos, decía Lenin que una mentira mil veces repetida se convierte en verdad. Es lo que quieren hacer exactamente con el tema de Colombia, en el que aparece como verdugo el Estado, teniendo como instrumento a la policía, y los manifestantes pobres víctimas. Una manifestación completamente pacífica. Mentiras, mentiras. No hay manifestaciones pacíficas. Recordemos, para empezar, que estos pacíficos manifestantes destruyeron todo el sistema de Transmilenio, gran parte; destruyeron el Mío en Cali, destruyeron los medios de comunicación masivos de Cartagena, de Barranquilla, de Pereira, actos de violencia inaceptables; quemaron varios CAI, Centro de Atención Inmediata de la Policía y que estuvieron a punto de quemar uno con los policías adentro…