Queridos amigos, un observador desprevenido diría que hay en América Latina una turbación general del orden público en muchas de sus regiones y expectativas en otras de que algo parecido ocurre. Desde luego que todo tiene sus particularidades, todo tiene también un punto de vista, una perspectiva desde la cual se la mire. Pero el caso de Colombia es un caso sui generis, claro que Colombia es el objetivo primero y fundamental de los violentos, como lo ha sido siempre, por su posición estratégica, por su gente, por la región que tiene todo, tiene las montañas, tiene mares sobre el Caribe, tiene mar en el Pacífico, tiene vecindad nada menos que con el río Amazonas, con el río Orinoco, cuatro grandes vertientes hídricas, el mayor poder del mundo en biodiversidad, en fin, Colombia es el sitio ideal para montar un conflicto y para perturbar el orden existente, sustituyéndolo. Nadie sabe exactamente por qué, aunque en el fondo de lo que estamos seguros es que hay una nueva conjura comunista contra el orden público en la América Latina. La situación es muy grave en muchas regiones…