LONDRES – El Centro de Seguridad Cibernética del gobierno inglés junto con autoridades australianas reportaron ayer al servicio militar de inteligencia ruso como un agresor cibernético pernicioso para la seguridad global, después de haber lanzado varios ataques destinados a sembrar confusión en las democracias occidentales, incluyendo interferencia en las elecciones presidenciales de los Estados Unidos en 2016.