En 1941, en el marco del holocausto nazi, Heinrich Himmler (jefe de las SS) ordena el arresto y deportación a campos de concentración de todos los homosexuales conocidos de Alemania, con excepción de unos pocos oficiales y jerarcas nazis. También en 1943, ordena que los gitanos sean puestos al mismo nivel que los judíos y deportados a campos de concentración.