Representantes del gremio de los bares y eventos especiales se congregaron el día de ayer en la Plaza de Bolívar para protestar en contra de las restricciones al funcionamiento de sus establecimientos impuestas por parte de la alcaldesa Nayibe López.
Algunos de los voceros del sector se encadenaron para exigir ayudas por parte del Distrito para el pago de nóminas y arrendamiento, además de solicitar a la Alcaldía de la ciudad que se les permita funcionar bajo un modelo de alternancia.
David, un joven manifestante de 29 años, resaltó que TransMilenio, colegios e incluso iglesias ya operan con relativa normalidad, mientras que los bares y los eventos están endeudados e incluso quebrados. La Secretaría de Gobierno de la capital dispuso de una mesa de diálogo para llegar a un acuerdo.