JARTUM – Las fuerzas militares de Sudán disolvieron el gobierno civil del país y arrestaron a sus líderes, generando denuncias y protestas en las calles de sus principales ciudades por lo que muchos califican como un golpe de estado. Dentro de los detenidos se encuentra al parecer el primer ministro Abdalla Hamdok, quien habría sido puesto bajo detención domiciliaria, siendo transportado después a un lugar no conocido al negarse a emitir un comunicado a favor de la toma del poder por parte de los militares. Con posterioridad, se habrían presentado denuncias de disparos de la fuerza pública hacia manifestantes que protestaban contra la toma de poder, dejando por lo menos a 3 personas muertas y a más de 80 heridas.
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