WASHINGTON – El Departamento de Justicia de los Estados Unidos informó ayer que fue el Fiscal General William Barr quien dio la orden de dispersar la manifestación pacífica que se había concentrado en las inmediaciones de la Casa Blanca el pasado lunes, con la implementación de gases lacrimógenos y bolas de goma, en antelación a la rueda de prensa que daría el presidente Donald Trump desde frente a una Iglesia de la zona, visita que fue fuertemente condenada por el Obispo Episcopal de la Diócesis de Washington. Varios reporteros de diferentes cadenas de televisión resultaron heridos cubriendo esta noticia, al igual que las protestas en diferentes ciudades del país.