Para satisfacer las exigencias de las FARC y poder adelantar con ellos, lo que tanto enorgullece el plan de paz; el presidente Santos les entregó el país para que lo convirtieran en el coto de caza de sus inmundicias y sus apetitos. En otras palabras les entregó el país para que se enriquecerían fabulosamente a través de la producción y tráfico de cocaína…