Por Roberto Mora
Como hemos informado en La Hora de la Verdad, el Reino Unido se apresta a decidir sobre su permanencia en la Unión Europea, en un referendo por celebrarse el 23 de junio. Y aunque diferentes encuestas, con variadas metodologías arrojan resultados disímiles, la tendencia es clara y refleja un aumento del apoyo por la salida
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En efecto, la respetada “encuesta de encuestas”, como se le conoce allí porque hace un promedio de las 6 más importantes encuestadoras, arroja una diferencia de dos puntos a favor de la salida (51% contra 49%). Hace solo tres semanas, la campaña por permanecer lideraba cómodamente esta encuesta con una ventaja de 10 puntos (55% contra 45%). También el Finantial Times agrega varias encuestas y reporta una ventaja de dos puntos por la salida (47% y 45%). La ventaja más cómoda para la salida la reporta The Guardian, con 53% contra 47%
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La campaña por la salida ha enfatizado últimamente en el radicalismo islámico y la posibilidad de que en un futuro Turquía acceda a la Unión y por tanto sus 77 millones de habitantes adquieran el derecho de circular libremente y residenciarse en el Reino Unido. También ha recibido un significativo apoyo de los tabloides más importantes, el Sun y el Daily Mail, con una circulación de, respectivamente, 1.8 y 1.6 millones. Los tabloides han sido euroescépticos de vieja data, y se han expresado abiertamente por la salida.
Por su parte, la campaña por la permanencia ha apelado a las consecuencias económicas de la salida, que afectaría el Producto Interno Bruto, la inflación y el empleo, y ha sido apoyada por autoridades económicas como el Banco Central del Reino Unido, el Fondo Monetario Internacional y la OCDE. A estos actores se suman ahora 12 sindicatos encabezados por el poderoso UNITE, que en una carta abierta al diario Laborista The Daily Mirror argumentan que abandonar la Unión sería fatal para el empleo, los derechos de los trabajadores y el sistema de salud.
El Primer Ministro Cameron hace campaña por la permanencia, pero su partido está dividido sobre el particular y cinco de sus 22 ministros hacen campaña por la salida, a quienes se suma el ex alcalde de Londres Boris Johnson. Por su parte el partido laborista, teóricamente a favor de la permanencia, no ha demostrado gran interés en el asunto, aunque el ex primer ministro Gordon Brown se sumó recientemente a la campaña.
Más allá de estas discusiones puntuales, uno diría Dr. Londoño que desde el punto de vista geopolítico no parece buena idea que el Reino Unido decida aislarse justo cuando poderes emergentes amenazan la supremacía occidental, y problemas globales como el terrorismo y el calentamiento global requieren más cooperación.