En el momento en que les hablamos a ustedes queridos amigos, es incierta todavía la suerte final de nuestros hombres en Cumbitara en el Departamento de Nariño, nuestros hombres del Ejército que fueron emboscados por una pandilla armada de las FARC, de los narcotraficantes que operan en esa región del país. Parece ya segura la muerte de cuatro de nuestros muchachos, tres soldados profesionales y un sargento; y se sabe incierta la situación de cuatro más. Pueden ser hasta ocho los muertos en el hecho más duro de sangre, en el resultado adverso más lacerante que han tenido las Fuerzas Militares de Colombia en el periodo presidencial del presidente Iván Duque. Aquí se citan todos los demonios; todos confluyen que es confitar a una zona cocalera ¿Por qué es una zona cocalera? porque no ha sido posible fumigar con glifosato porque los de la Corte Constitucional no dejan, y no dejan porque puede eventualmente ser cancerígeno el glifosato, lo que es una inmensa mentira…