WASHINGTON – El presidente estadounidense Donald Trump estuvo reunido el día de ayer con sus principales asesores en seguridad nacional con el fin de discutir la manera de sancionar al mandatario sirio, Bashar al – Assad, por perpetrar un ataque con armas químicas la semana pasada que le costó la vida a decenas de civiles, muchos de ellos niños. La administración no ha descartado aún el uso de la fuerza armada. Por su parte, la inteligencia estadounidense afirmó tener la creencia de que al – Assad guardó algunas de las armas químicas que prometió entregar y destruir bajo el acuerdo logrado con el auspicio de Rusia en el año 2013.