WASHINGTON – El presidente estadounidense Donald Trump se defendió ayer de fuertes críticas afirmando que no estaba contento con los cánticos de sus seguidores en un rally de Carolina del Norte en el que pidieron devolver a su país a una congresista de oposición de origen extranjero a quien criticó. Trump ha sido acusado de xenofobia a causa de comentarios al respecto en su red social Twitter, a lo que ha afirmado que no se trata de un caso de racismo.