WASHINGTON – Las autoridades del estado de California trabajan arduamente intentando apagar más de una decena de incendios forestales que desde el domingo pasado han destruido más de 46.500 hectáreas, incluyendo cientos de edificaciones, y le han causado la muerte a por lo menos 15 personas, mientras que más de 150 han sido reportadas como desaparecidas. Los bomberos aún no logran contener las llamas, que han sido avivadas por los fuertes vientos que golpean la región.