El Consejo de Estado mantuvo la sanción disciplinaria de la Secretaría de Salud de Bogotá en contra del Hospital San Ignacio por -presuntamente- desconocer las obligaciones que establece la ley frente al aborto en el país.
El alto tribunal tomó la decisión luego de que se conociera que el Hospital se negó a practicar un aborto a una mujer, cuyo bebé en etapa de gestación, presentaba hidrocefalia y una cardiopatía severa, lo que estaría dentro de las causales permitidas en Colombia para abortar.
El Hospital San Ignacio, de identidad católica, argumentó que no accedió a practicar el aborto hasta conocer si efectivamente no existían esperanzas para la vida del feto y para no violar el derecho a la objeción de conciencia de su personal médico.