Solo después de un mes de enfrentamientos y desplazamiento de miles de familias en el Catatumbo- Norte de Santander, donde los Pelusos y el ELN se disputan el control territorial del manejo de la coca, llegaron los altos mandos militares para buscar conjurar la situación de orden público.
A su llegada los ciudadanos le dijeron al Comandante de las Fuerzas Militares, General Alberto Mejía que el Estado los había abandonado y que ellos no estaban enterados de nada de lo que estaba ocurriendo.
Los combates han generado el desplazamiento de 2.819 personas y dificultades a 144.000 que se quedan sin servicios públicos.