Queridos amigos, en los últimos días hemos dedicado nuestras notas editoriales al tema de los temas que es el de Venezuela. Mientras Venezuela no resuelva su problema, Colombia va a estar en una situación de desequilibrio feroz, estará en un jaque que puede ser un jaque mate. Venezuela no se puede hundir, la gente de Venezuela no tiene que salir corriendo, no puede tener que salir corriendo de su Patria para buscar un plato de comida, y sale corriendo hacia Colombia obviamente, eso no puede suceder. Venezuela tiene que ser nuestro gran socio y nuestro gran aliado. Ese es tema de los temas, pero es que aquí los asuntos se atropellan y uno ya no sabe a qué horas decir tantas cosas como las que hay que decirle a los colombianos. Hoy en la mañana, y no porque no lo hubiéramos propuesto, sino porque así resultaron las cosas, enfrentamos dos temas de una importancia gigantesca, dos de las herencias malditas que le dejó Juan Manuel Santos a este país, que durante ocho años no hizo otra cosa que robar con sus aliados y destruir una nación, que merece desde luego un futuro y a la que no se le ha explicado suficientemente qué pasó…