Araujo expresó que ver al expresidente Uribe “en el oprobio de una condición judicial como esta, lo devuelve a uno en el tiempo al momento en que recibió la Presidencia y su primer acto de gobierno fue ir al Cesar”, que era el segundo departamento con más secuestros.

“Una Sala armada a la carrera se arrogó la facultad de derrotar el principio de presunción de inocencia, nada más y nada menos del colombiano que más ha ganado elecciones y por mayor diferencia de los últimos 100 años”, afirmó el excandidato al Senado.

Agregó que “lo que repugna es el rasero diferencial adoptado por la misma colegiatura judicial para que en cambio no se dictara la misma medida sobre el criminal confeso y capturado en flagrancia, Jesús Santrich”.

Recordó que desde siempre ha habido una persecución de la justicia en contra de los colaboradores y las personas cercanas al expresidente Uribe; el encarcelamiento masivo de los congresistas, después siguieron con el director del DAS, luego los ministros, los funcionarios y los asesores cercanos.

Aseguró que todo esto para inculcar en la psique colectiva la noción de que si todos los subalternos y aliados de Uribe eran criminales y él era el jefe, pues nada más fácil para decir “Uribe es el jefe de una gigantesca estructura delincuencial”.