Dejemos la trivialidad y vamos a los problemas
Lo más grave que nos pudiera pasar a estas alturas de las inconsecuencias y los problemas del país, es que nos volviéramos definitivamente frívolos, y ese peligro tenemos. Hay una columna del profesor Mackenzie desde Francia, desde París, que es una página de antología, referente a una persona a quien llevamos en el corazón, muy cercana esta casa, que escribió un artículo minimizando los problemas y llevándolos a un punto en que no pueden ser tratados así. Esto es una cosa perfectamente seria lo que está ocurriendo en Colombia para que todos lo reduzcamos a saber si hay simpatías o antipatías personales con el presidente Iván Duque ¡Por Dios! ¡Por Dios, no! Dejemos la trivialidad, dejemos la frivolidad y vamos a los problemas…
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