Comunicado – “Me retiro del debate de la Comisión II, desarrollado el 17 de Septiembre del 2014, por inconstitucional e ilegal” Thania Vega de Plazas

Avocados como estamos hoy a un debate, desde su génesis, oscurecido por el evidente conflicto de intereses del citante y deslegitimado por el desprecio a las reglas constitucionales y legales que imponen a cada uno de nosotros, como representantes del Pueblo, en el ejercicio de las funciones inherentes a tan noble calidad, debo dejar constancia de mi voz de protesta, respetuosa pero categórica, al desarrollo del mismo.
Así se insista hasta el cansancio sobre la legalidad de este ejercicio, y se ampare la extralimitación de las funciones por quien lo ha suscitado, en la necesidad de una discusión pública sobre el fenómeno paramilitar en Colombia, el marco normativo de rango constitucional y legal no dan lugar a calificarlo de modo distinto a un atropello al derecho vigente y a las reglas que regulan el debate democrático.

Debo precisar que mis cuestionamientos al desarrollo de este debate, son en torno a un rechazo a la forma arbitraria e inconstitucional en que se le ha dado trámite. En el seno de la legalidad, es inconcebible tal desprecio al estado de derecho.

Con lo anterior, califico el presente debate como contrario a derecho, irrefutablemente inconstitucional y, por tanto, vacio del menor grado de legitimidad y vinculariedad. Un estado de cosas inconstitucional impone el deber ético moral de no participar en su desarrollo. En consecuencia, el deber de asistir al mismo entra en tensión con la obligación de todo congresista de NO participar ni patrocinar un acto contrario a la Constitución y la Ley como el que presenta el debate, a las voces del Artículo 4º del propio Reglamento del Congreso: “La Constitución es norma de normas. En todo caso de incompatibilidad entre la Constitución y esta ley de Reglamento u otra norma jurídica, se aplicarán las disposiciones constitucionales”.

En este caso particular, el Supremo valor jurídico de la Constitución Política y el respeto hacia el restante ordenamiento me impone el deber de abstenerme de hacer presencia en el debate propuesto por el citante, dejando claro que mi retiro del recinto en tanto éste se lleva a cabo y lo consignado en esta constancia, constituyen una opinión amparada con la inviolabilidad de que trata el artículo 265 del Reglamento del Congreso, así como un enfático rechazo al lamentable decurso que hoy se va a materializar en un acto arbitrariamente inconstitucional.

Muchas gracias,